2 oct 2017

"Por cojones" y otras reflexiones sobre el 1-O.


Hace mucho tiempo que no encontraba la forma de enfrentarme al blog para escribir nada medianamente interesante. La vida, a veces, es demasiado compleja como para encontrar cierto nivel de... "inspiración". Pero los acontecimientos de los últimos tiempos en lo que se refiere a la política y la territorialidad de esta cosa llamada España (la llamo cosa porque llamarla país se me hace duro en este momento), cuanto menos, merecen una reflexión por parte de todos.


Ayer, 1 de Octubre, creo, todos fuimos testigo de una sobredosis de "por cojones", "por cojones votamos" y "por cojones no votáis" o " por cojones no vale pa ná". Siempre digo que, por cojones, nunca sale nada bueno ni bien (aunque a veces no queden más cojones, irónicamente).

Servidor tuvo la fortuna de poder vivir "in situ" la jornada del referendum de autodeterminación en Catalunya, sí, ese que tan a prisa el gobierno español decidió llevar al "imparcial" tribunal constitucional y, cuya resolución decidió aplicar a base de palos, porque de otra forma no se puede llamar a lo que sucedió ayer (por cierto... cuán rápida es la justicia cuando a algunos les interesa, ¿no?). La cosa es tan así que los periódicos, no destacan en portada  la aplastante victoria del SI, lo cual era de esperar ante la no campaña del NO en pro de la llamada a la NO PARTICIPACIÓN, sino que abren con la brutalidad que se vio a lo largo del día (ahora que vengan y me hablen de Venezuela).

La realidad es que, para variar, la gente pagó los platos rotos de unos políticos mediocres que, en sus respectivas huidas hacia adelante, por las corrupciones varias de las que han sido parte reiteradamente, han ido dejando un reguero de incomprensión, de envolturas en banderas utilizadas como armas arrojadizas y, para rematar la faena, de violencia, mucha violencia en la jornada de ayer, injustificable desde cualquier punto de vista se mire como  se mire. La gente sólo quería votar.

En la mayoría de los colegios o locales previstos para la votación, vista la represión ejercida en los últimos días desde el gobierno español, había personas desde las 5 de la mañana, incluso desde días antes con actividades varias lúdico-festivas, para poder mantener los centros abiertos ante la amenaza de cierre. A las 9 debían abrirse para iniciar la votación, pero a los pocos minutos se dieron cuenta que la Guardia Civil había "hakeado" el servidor donde estaban los datos del censo universal y no se podía votar, a excepción de algunos centros a los que se les había enviado el censo en papel que les correspondía. 

Esto es lo que se encontraban los miembros de las mesas al intentar acceder a la página del censo.
En algunos casos, incluso sin censo se decidió apuntar a mano los datos de los votantes, lo que de por sí ya pone en riesgo el resultado de una votación por la falta de garantía de no duplicidad de votos, como así parece que ocurrió en algunos casos (que nadie se engañe, no hay que ser mezquino ni ventajista, esto no fue lo que provocó un resultado tan apabullante a favor del SI). Creo que si me hubiesen dejado votar a mi, madrileño, hubiese votado que SI ante las tropelías que ayer tuvieron lugar.

Hora y media más tarde y después de la guerra informática se empezó a votar, con total tranquilidad de una población que sólo quería expresar su parecer ante la cuestión que se les planteaba, aunque esa tranquilidad el gobierno decidió convertirla en un esperpento de violencia del que, espero, se arrepientan el resto de su vida, porque lo único que han conseguido es que quien iba a votar NO, se decidiera por el SI a la independencia de Catalunya de un Estado Español absurdamente dirigido por la trama más corrupta de las historia de este país.

Seguramente podríamos jugar a discernir y debatir si los argumentos del Govern de Catalunya son más o menos consistentes, si realmente se ha fundamentado en la historia o si ha sido un ocultar otras tramas de corrupción "locales", o si han tirado por la calle de en medio sin contar con que la mitad de la población no era de su cuerda por mero interés partidista y/o económico...Supongo que de todo hay.

Da igual si se piensa que en un mundo de globalización, donde las fronteras territoriales cada vez tienen menos sentido, imponer una más es de lo más absurdo o si es de lo más conveniente porque refuerza "el ego que llevo dentro", o si por vestirme con una bandera "soy más o menos patriota" (yo añadiría idiota). Todo eso da igual.

La actuación de gobierno español ha sido tan nefasta que tampoco han dado muchas más opciones. La burbuja en la que aparentemente viven algunos haciendo ver que no hay problema y que las cosas se arreglan solas nos ha traído hasta aquí, en un punto en el que parece no haber retorno, que reconducir la situación se antoja tremendamente difícil. Basta con ver las intervenciones del propio presidente del gobierno y sus ministros, como para darse cuenta de la estupidez con la que se maneja el gobierno español. No hablemos de sus apoyos parlamentarios, los explícitos y los implícitos.

¿Qué nos queda ahora? Sinceramente, creo que esperar que el gobierno aplique el 155 de la constitución para suspender la autonomía y evitar la declaración de independencia unilateral por parte de gobierno catalán, es decir, otro despropósito más. Lo que sería sensato y, creo, sano es que esto hubiese servido para decir... vale, pactemos un referendum de verdad, con todas las garantías para que:
  1. no haya violencia.
  2. se pueda ir a votar con todas las de la ley y que lo catalanes decidan sobre su futuro.
  3. que saliese el resultado que saliese, todos aceptáramos lo que se decidiese y se pueda afrontar el futuro, por una y otra parte de la manera más digna, en paz y, a ser posible, sin enfrentar al pueblo, que bastante se ha hecho ya por enfrentarlo.
Ahora estamos en la fase de negación vs. sacar pecho, el  "no ha habido referendum" frente al "vamos a proclamar la independencia porque hemos ganado claramente". Creo que ayer perdimos todos, el conjunto de los españoles y también los catalanes... creo que esto es un punto de no retorno.

Me da mucha rabia que, por la ineptitud de nuestros gobernantes, por la gran ignorancia de buena parte de los electores que votan al crimen organizado para que nos gobierne y por la cabezonería, por las mentiras de unos y otros, tengamos que romper una relación que, bajo mi punto de vista es de lo más enriquecedora en todos los sentidos. En la diversidad y el reconocimiento de la diferencia está la riqueza de un país, aunque unos cuantos intenten no enterarse. No se pueden emplear los argumentos de la rivalidad futbolística en la política, porque no hay razón en ello, sólo vísceras. La política puede tener mucho de esto último, pero sin razón, la política es inútil, simplemente no es política y por eso estamos como estamos.

Ahora me acuerdo de que el PP gobierna porque a los dirigentes del PSOE se le ocurrió la brillante idea de decir ser de izquierdas y pactar con los vástagos de la ultraderecha era muy progre, o que no apoyara una moción de censura que desbloquease un poco la situación y permitiera ganar tiempo para organizar las cosas de una forma medianamente civilizada.

Me acuerdo también de la eterna fractura de la izquierda, cada uno con su propia banderita de colores sin ponerse nunca de acuerdo en lo fundamental, en lo que importa. Se olvidan los partidos de la izquierda que en la derecha española, todos van a una...

En fin... tal vez esto sólo sea un desahogo de uno que entiende poco lo que ocurre, porque es incompresible.









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